El origen del Día del Joyero y Relojero se encuentra en la conmemoración del nacimiento de Benvenuto Cellini, 3 de noviembre de 1500.
Cellini fue un gran escultor y joyero que llegó a realizar obras importantes como el crucifijo que Francisco de Médicis regaló a Felipe II en 1576.
La orfebrería es el trabajo artístico realizado sobre utensilios o adornos de metales preciosos, o aleaciones de ellos. Procede del latín auri (“oro”) y faber (“fabricador”).
Los metales que constituyen los objetos de orfebrería propiamente dichos son eminentemente la plata y el oro o una mezcla de ambos.