Hace 60 años El Litoral compartía con sus lectores el último viaje en tranvía en Santa Fe.
Textos. Mariano Rinaldi. Fotos. Archivo El Litoral.
En 1961 los santafesinos veían con asombro los últimos viajes de los tranvías eléctricos.
El domingo 1° de mayo de 1961, el diario El Litoral realizaba una emotiva crónica del servicio tranviario: «A medida que el tranvía avanzaba, sus rieles iban perdiendo su razón de ser». Con estas palabras se compartía a los lectores el último viaje en tranvía en Santa Fe, dejando atrás toda una experiencia cotidiana del transporte en nuestra ciudad.

La red más importante de tranvías estaba en Buenos Aires, la ciudad contaba con 900 kilómetros de vías. En 1863, circuló el primer tranvía tracción a sangre, desde Plaza de Mayo hacia estación Retiro. Luego el eléctrico en 1867, y en 1870 dejo de ser un complemento exclusivo del ferrocarril para pasar a ser específicamente un transporte urbano.
En mayo de 1886 en Rosario se inauguró la primera línea del Tramway Anglo-Argentino, con cabecera en la estación del Ferrocarril Central Argentino y un circuito que atravesaba el entonces pequeño conglomerado urbano rosarino.

En 1885, en Santa Fe, durante la intendencia de Mariano Comas, quedó inaugurado el servicio de tranvías a caballo. Luego, en 1914, se pusieron en funcionamiento los tranvías eléctricos con la presencia del gobernador Manuel Menchaca y el intendente Miguel Parpal. En nuestra ciudad la red de tranvías estaba organizada por secciones: la primera recorría el sector noreste, la segunda el centro-oeste y la tercera tenía dos ramales, uno hacia Guadalupe y otro hacia el Hipódromo. Además, en la calle San Martín, entre Cándido Pujato y Mariano Comas, se encontraba la Estación Progreso, donde los tranvías eran estacionados luego de la jornada laboral diaria.
Las líneas que integraban esas secciones con sus recorridos tenían las primeras paradas en las distintas calles de Santa Fe. La línea 1 comenzaba en General López y San Juan. La línea 2, en Boulevar Gálvez y Vélez Sarsfield. La línea 3, en el Cementerio Municipal. La línea 4, en Javier de la Rosa y la línea 5, en el Matadero Municipal. Por último, la línea 6, en Alvear e Iturraspe.

Finalmente y por decreto del Poder Ejecutivo Nacional, a fines de 1961, se decidió suprimir por completo el servicio de tranvías bajo el pretexto de «obsolescencia» y «enorme déficit». Pronto las estaciones a las que pertenecían las distintas líneas se fueron cerrando.
Ese mismo año, la ciudad de Santa Fe dio el giro final del que fue su último trayecto en tranvía. En las calles 25 de mayo y Boulevar Pellegrini y de la mano de los conductores más experimentados: Luciano Sartori y Luis Pividori, los santafesinos se reunieron espontáneamente para despedir a quien desde 1914 los había transportado al trabajo o a una cita familiar, cerrando así un capitulo en la historia del transporte de nuestra ciudad.
