Por María Alicia Oliva
Muchas son las veces que me escriben al blog mujeres pidiéndome ideas de looks para ir a trabajar, parece ser un tema que inquieta a más de una.

Por suerte la mayoría de los trabajos de oficina en la actualidad ya no requieren que vayas vestida forzadamente de una forma determinada.
El uniforme es algo que ya no se ve tanto, aunque algunas mujeres lo anhelan, ya que es la forma más practica de vestir todos los días.

El clásico de todos los tiempos es la camisa blanca, con un pantalón de gabardina o jeans. Pero claro, esto a veces aburre demasiado.
Hay muchos factores a tener en cuenta al momento de vestirse. No se trata solamente de la prendas que elijas, sino de cómo acompañar el look escogido: el pelo, el make up y la presencia son cosas que determinan tu personalidad y estilo.

No soy de las mujeres que cree que tenemos que estar siempre impecables. A veces por cuestiones de tiempo u organización se nos pasa un detalle importante que es “nuestra imagen”, esa que tanto habla de nosotras.
Por eso yo te aconsejo que tengas ropa destinada al trabajo, de colores neutros y telas practicas. Es decir, planteate un uniforme para usar todos los días de la semana, que vaya con tu estilo y personalidad. Así no vas a tener que estar pensando todas las mañanas qué ponerte.

Te recomiendo que adquieras un trajecito, de algún color neutro Creeme te va a inspirar a armar mil outfits de oficina. Podés usarlo como traje, combinar el pantalón con un cárdigan, suéter o polera. También podés usar el saco con jeans o algún pantalón ancho.
Tenía un profesor en la facultad que decía: “Vístete como si fueras al trabajo que siempre soñaste”. Así que, ya sabés. Ahora hasta tu jefa va a querer vestir como vos.